Hacia 1900-1930
Lucio Vergara Machicote (Aranaz, 6 de julio de 1892 – Legazpia, 4 de agosto de 1978) fue ebanista y fotógrafo aficionado. Estudió en la Escuela de Artes y Oficios de San Sebastián y trabajó en Aranaz en el taller de carpintería de su padre. El 27 de mayo de 1920 contrajo matrimonio con Felicitas Oñativia, natural de Urretxu y maestra en la escuela de Aranaz. El matrimonio se trasladó el 7 de marzo de 1930 a Legazpia, donde ella siguió ejerciendo de maestra y él trabajó en la fábrica Patricio Echeberría S.A. hasta su jubilación. Tuvieron como hijos a Jesus María (S.J.), María Josefa, Bernardo (S.J.), María Pilar y Juana María. Su familia en Aranaz regentaba un comercio donde se vendían productos de alimentación y tejidos, que estaba ubicado en el bajo de la casa Gartxinea, sita en el número 3 de Goiko Karrika. En documentos oficiales consta que en 1926 Lucio Vergara era concejal del Ayuntamiento de Aranaz y que en 1937 ejercía de juez municipal de Legazpia.
El fondo fotográfico está formado por 1.061 placas de vidrio de gelatinobromuro, en su mayoría de medidas 13x18 cm, 9x13 cm y 6x9 cm, con una temática variada en la que predominan fotografías de grupos (familias, bodas, grupos de amigos y amigas), retratos (hombres, mujeres, parejas), fotos de comuniones y eventos de la localidad (fiestas, procesiones). Las imágenes denotan un trabajo meticuloso de composición de la escena, algo que, según sus familiares, cuidaba mucho. Sus fotografías, sobre todo tipo de eventos, familiares y públicos tanto cívicos como religiosos, reflejan la vida de las primeras décadas del siglo XX en Aranaz y suponen un testimonio gráfico de gran valor para la reconstrucción de la historia de la villa.
El fondo se conservó durante décadas en el desván de la casa familiar Gartxinea en Aranaz, gracias, en gran parte, a su sobrina María Vergara Vergara, hija de Gabriel Vergara –hermano de Lucio– y de Josefina Vergara, que conservaron este legado tal y como lo dejó su autor, en una pequeña caseta de madera construida por él mismo en el desván y que utilizaba como laboratorio casero. En este cubículo se guardaron las cajas con las placas fotográficas de vidrio, frascos con químicos y otros utensilios necesarios para el revelado fotográfico. En 2016, Ángel Murua Iñurritegi, gran aficionado a la fotografía, y su mujer María Rosario Alústiza Vergara, hija de María Pilar Vergara y nieta de Lucio Vergara, tras hablar con María Vergara, recibieron permiso para recuperar todo aquel material. Lo trasladaron a su domicilio en Legazpia donde pudieron limpiarlo, clasificarlo y escanearlo.
Pendiente de tratamiento.